Los y las socialistas nos sumamos de nuevo a la conmemoración del Día Mundial del SIDA, el 1 de diciembre, día impulsado por Naciones Unidas para actuar, sensibilizar y recordar que la lucha contra esta pandemia global causada por la infección por el VIH sigue siendo imprescindible. El lema y la reflexión de este año tiene que ver con las comunidades de personas con el VIH, grupos de población clave, personas con el VIH, junto con educadores, trabajadores sociales y profesionales sanitarios, organizaciones de la sociedad civil, sociedades científicas, etc. Comunidades a las que debemos décadas de trabajo y lucha para erradicar esta enfermedad. Mujeres y hombres, jóvenes y mayores, que lideran y luchan por la prestación de servicios, defienden los derechos humanos y dan apoyo. Estas comunidades son clave para el apoyo y el avance, y es de justicia mostrar nuestro total reconocimiento y gratitud. Desde el PSOE apoyamos y coincidimos con los objetivos de Naciones Unidas, debemos acabar con el sida como una de las prioridades para la salud pública, es un derecho de las personas que sólo se podrá hacer realidad haciendo que la atención de calidad esté accesible y disponible para todos y todas, sin exclusiones. Por estas razones, entre otras, cuando llegamos al Gobierno en 2018 una nuestras primeras medidas fue recuperar la sanidad universal por la que tanto hemos luchado. También visibilizamos el Plan Nacional sobre el Sida y nombramos a una nueva directora para impulsar sus acciones desde el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. Los datos, tanto mundiales como los de nuestro país, nos indican que no debemos bajar la guardia: en 2018, 37,9 millones de personas viven con el VIH en todo el mundo, la cifra más alta de la historia, pero se estima que una cuarta parte no sabe que tiene el virus. En España y según el último informe publicado por el Ministerio de Sanidad en noviembre 2019, entre 130.000 y 170.000 personas están infectadas por el VIH, de las que aproximadamente una de cada siete (14 %) no está diagnosticada. En 2018 se han notificado 3244 nuevos diagnósticos de VIH. Desde el inicio de la epidemia se han notificado un total de 88.135 casos de sida. Tras alcanzar su máximo a mediados de la década de los 90, el número de casos de sida notificados ha experimentado un progresivo descenso desde 1996. En el año 2018 se notificaron 415 casos de sida. Las personas afectadas en nuestro país requieren nuestro apoyo y el reconocimiento y el respeto de sus derechos, el derecho a la igualdad de trato y a la no discriminación.
Aunque en España se ha disminuido el diagnóstico tardío, debemos seguir trabajando en el diagnóstico precoz y la prevención ya que son fundamentales para controlar la infección y conseguir los objetivos de ONUSIDA. En este año que hemos estado con responsabilidades de gobierno hemos trabajado con las Comunidades Autónomas para aumentar los enfoques preventivos como la PreP (profilaxis pre exposición) que recientemente incluimos en la financiación pública, asunto más que reclamado por las diferentes sociedades científicas y colectivos, y alineado con los objetivos de ONUSIDA. Al mismo tiempo seguimos trabajando en la promoción del uso del preservativo en las relaciones sexuales y concienciar socialmente sobre la necesidad de conocer el seroestatus, hemos recuperado el reparto gratuito de preservativos en grandes eventos y abordamos la respuesta al VIH y al sida con una visión no sólo transversal, sino también desde un enfoque de género. Avanzamos en derechos en poco tiempo y eliminamos las restricciones en el acceso al empleo público y la función pública de las personas con el VIH a finales del año pasado, una rectificación reivindicada por los colectivos que asumimos e hicimos realidad. También impulsamos el Pacto Social por la No Discriminación y la Igualdad de Trato asociada al VIH, y asumimos el compromiso que supone la Agenda 2030 de Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible, que establece como reto el horizonte temporal de poner fin a la epidemia de VIH y Sida en 2030. Finalmente queremos manifestar nuestro agradecimiento y reconocimiento de todos los profesionales sanitarios en su labor diaria, los movimientos sociales de las organizaciones sanitarias, de los colectivos ciudadanos y las organizaciones sociales que siguen luchando incansablemente desde hace décadas. Hoy también queremos tener un recuerdo emotivo para nuestro compañero Pedro Zerolo que tuvo un compromiso decidido con esta lucha como embajador de las Naciones Unidas sobre el VIH/sida (ONUSIDA). También debemos recordar a los millones de personas que perdieron su vida por esta enfermedad, su pérdida nos hace trabajar por el futuro de las personas que hoy en día viven con el VIH, y siempre lo haremos de forma positiva.